Apúrense, que empieza el mundial... de fútbol
Ha concluido la fase preliminar del campeonato nacional sub-23 en la que solo seis equipos completaron los 40 partidos previstos en el calendario. Es primera vez en las cinco ediciones que se dejan de efectuar más de diez partidos. Las últimas fechas, pasadas por agua y arrinconadas mediáticamente por el fútbol, se han jugado por el sistema muy cubano de «matando y salando». Pinar del Río fue el que más sufrió ese maratón.
Con la clasificación de Isla de la Juventud, los cuatro semifinalistas son (fueron) nuevos en la postemporada. Y hay que hablar en dos tiempos porque, de manera inédita, el torneo está picado en tres partes. Ahora en dos. Uno de los equipos que avanzó (Granma) se había quedado en el camino antes de que se supiera el cuarto cupo. Raro, ¿verdad?
Si un equipo tuvo una caída estrepitosa ese fue Villa Clara, del podio tres temporadas seguidas, incluido el subtítulo en 2017, rodó hasta el puesto 15, solo delante de un Guantánamo que mantiene su último lugar en la lista por tercer año consecutivo y por cuarta vez en la breve historia de estos torneos. Alarmante lo de uno, y lo del otro, ¿qué decir?
Aplausos para un Santiago de Cuba que hasta el último momento estuvo tratando de entrar en los play off para intentar retener su corona. Nunca se quejaron de las bajas, previstas o imprevistas, y con lo que tenían se batieron y quedaron en un honroso quinto escaño.
Artemisa y Habana, monarcas de las dos primeras ediciones, respectivamente, quedaron en el fondo de la zona occidental junto con los villaclareños, pese a que los capitalinos blasonaban de uno de los mejores cuerpos de pitcheo de la justa; su PCL (2.74) no se corresponde con la ubicación.
Entre domingo y martes se debe saber el adversario de Las Tunas en la final. Por lo visto hasta ahora, Cienfuegos presume de más musculatura para imponerse en el play off contra los Piratas, pero estos tienen sangre de David. ¿Se acuerdan de aquella postemporada de La Isla contra Matanzas primero y después ante Ciego de Ávila en la Serie Nacional 54?
Vea algunos números comparativos de las series sub-23. Notará que en la actual el descontrol de los pitchers ha sido, lamentablemente, protagonista y la relación de ponches por boleto es la peor de todas.