La Mesa del Parlamento catalán aplaza a mañana la aplicación del auto de Llarena sobre los suspendidos
una vez finalizó la fase de instrucción de la causa especial por intentar subvertir el orden constitucional.
El presidente del Parlamento catalán, Roger Torrent (ERC), ha decidido dejar para mañana a partir de las 9.00 horas la decisión de la aplicación del auto de Llarena, pese a que ayer se conoció el informe de los Servicios Jurídicos de la cámara, realizado por Joan Ridao (exnúmero dos de ERC), que establece la suspensión «temporal» de los seis afectados y traspasa la capacidad de su voto a otros miembros de las listas de Junts per Catalunya (JpC) y ERC.
De esta manera, según los letrados del Parlamento catalán, Carles Puigdemont, Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Jordi Turull, Josep Rull y Raül Romeva perderían su condición plena de diputado autonómico pero no el acta, y se mantendrían las mayorías parlamentarias sin necesidad de que los afectados tengan que renunciar a su escaño.
Diferencias entre JpC y ERC
La reunión de este martes, sin embargo, no ha despejado la duda. El pleno de esta semana -de tres días de duración- empezará esta tarde sin que se haya resuelto cómo aplicar el auto del magistrado del Supremo. El pleno no votará hasta mañana por la tarde, por lo que ese es el límite que tiene la Mesa para resolver la situación.
Según fuentes parlamentarias consultadas por ABC, la decisión de la Mesa se ha producido porque hay discrepancias entre JpC y ERC. Los primeros no están de acuerdo, según parece, en aceptar la suspensión «temporal» porque, al fin y al cabo, es aceptar una suspensión por rebelión, una acusación que no aceptan. Una opinión que JpC comparte con la CUP; mientras que ERC quiere aplicar lo que han propuesto los letrados.
Los comunes, por su parte, a través de Elisenda Alamany, han defendido que el informe es una «solución» dentro de «la incertidumbre» creada, en su opinión, por el magistrado Llarena. Además, tanto los comunes como la CUP creen, además, que los seis diputados afectados por el auto no deberían perder los sueldos, por lo que no cambiaría absolutamente nada de la actual situación, en la que los seis diputados tienen su voto delegado.
«Fraude de ley»
Entre los grupos de la oposición también hay posiciones dispares. En Cs creen que la suspensión decretada por Llarena debe ser total y, según la dirección de este partido, no ven dentro del derecho que la Mesa «pueda legislar creando la figura del diputado sustituto». En declaraciones a los periodistas, Inés Arrimadas (Cs) ha señalado que «las sentencias hay que cumplirlas» y ha avanzado que su formación presentará la reconsideración de la decisión ante la Mesa y un recurso de amparo ante los tribunales.
En el PSC, sin embargo, aunque están en contra de la mayor parte del informe de los Servicios Jurídicos creen que la única opción de cumplir con lo establecido por Llarena es ejecutar la opción propuesta por Ridao. David Pérez (PSC), miembro de la Mesa, ha recordado, pese a todo, que si mañana por la tarde no está resuelto cómo se aplica el auto lo normal sería que Torrent «suspendiera el pleno hasta que se tome una decisión definitiva».
Por su parte, Alejandro Fernández (PP) ha indicado, en rueda de prensa, que los populares «no comparten» el informe de los letrados ya que, desde su punto de vista, si los diputados están suspendidos nadie puede ejercer sus funciones, aunque sea de forma «temporal». Y ha recordado que la legislación actual no permite la figura del «diputado sustituto», que es lo que indica el informe de Ridao. Desde Cs y el PP han alertado de que se podría estar preparando «un fraude de ley» por parte de la Mesa, si finalmente se suspende a los diputados pero con la figura del «sustituto temporal» ya que «no habría consecuencias prácticas entre estar suspendido y tener todas las capacidades de sus funciones».