Durante años, la competencia entre
modelos de inteligencia artificial se midió en puntos de benchmark, velocidad de respuesta o fidelidad en la generación de texto. Pero en las últimas semanas,
Google ha cambiado las reglas del juego con Gemini. Ya no se trata solo de quién responde mejor, sino de quién puede actuar por ti sin que tú tengas que intervenir en cada paso.
Seguir leyendo...