Defensa mueve ficha antes de 2026 con una inversión que cambia el equilibrio militar
El Consejo de Ministros ha autorizado un conjunto de inversiones que superan los 1.800 millones de euros y que inciden directamente en varios de los pilares operativos de las Fuerzas Armadas. Las decisiones se enmarcan en la planificación a medio y largo plazo del Ministerio de Defensa y buscan garantizar la continuidad de programas estratégicos ya en marcha.
Las medidas aprobadas afectan a la movilidad terrestre, la capacidad submarina, la protección del ciberespacio militar y el apoyo logístico especializado. Según el Ejecutivo, se trata de actuaciones necesarias para mantener la operatividad de los sistemas actuales y adaptarlos a los escenarios de seguridad contemporáneos, marcados por la interoperabilidad internacional y el aumento de amenazas híbridas.
Refuerzo de la logística terrestre
La mayor dotación económica corresponde a la adquisición de camiones tácticos medios y pesados de transporte, con un presupuesto de 1.040 millones de euros. El contrato autorizado tendrá una duración inicial de cuatro años, con la posibilidad de ampliarse dos años más.
Defensa señala que esta inversión permitirá renovar una parte significativa de la flota actual, compuesta en muchos casos por vehículos próximos al final de su vida útil. El objetivo es mejorar la movilidad de las unidades, asegurar el apoyo logístico en operaciones prolongadas y facilitar el despliegue tanto en territorio nacional como en misiones en el exterior.
Interoperabilidad y despliegue
La modernización de los camiones tácticos es considerada un elemento clave para la integración de las Fuerzas Armadas españolas en estructuras multinacionales. La capacidad de operar junto a aliados en misiones de la OTAN o de la Unión Europea exige sistemas logísticos compatibles y fiables en todo tipo de entornos.
Desde el Ministerio se subraya que estos vehículos no solo cumplen funciones de transporte, sino que son esenciales para sostener el ritmo operativo de las unidades desplegadas, especialmente en escenarios con infraestructuras limitadas.
Ajustes críticos en el programa S-80
Otra de las autorizaciones más relevantes es la modificación de la orden de ejecución complementaria del programa de submarinos S-80, con una dotación de 432,04 millones de euros. La medida busca asegurar una configuración adecuada de los buques y corregir obsolescencias detectadas en distintos sistemas.
El programa S-80 constituye uno de los mayores retos tecnológicos e industriales de la Armada. Su complejidad ha obligado a introducir ajustes progresivos para garantizar que las unidades cumplan con los requisitos operativos previstos y mantengan su vigencia a lo largo de su ciclo de vida.
Repuestos y sostenimiento
La inversión aprobada permitirá adquirir repuestos críticos, actualizar instalaciones y gestionar elementos que han quedado obsoletos durante el desarrollo del programa. Defensa considera estas actuaciones imprescindibles para asegurar la disponibilidad operativa de los submarinos una vez incorporados plenamente al servicio.
El refuerzo financiero garantiza además la continuidad industrial asociada al programa, considerado estratégico no solo desde el punto de vista militar, sino también por su impacto en el tejido tecnológico nacional.
Ciberseguridad como prioridad estructural
El Consejo de Ministros también ha autorizado una inversión de 353,54 millones de euros destinada a reforzar la ciberseguridad del Ministerio de Defensa. El contrato cubrirá el equipamiento y los servicios de protección global de la Infraestructura Integral de Información para la Defensa.
El acuerdo tendrá una duración de tres años, con inicio previsto en junio de 2026 o desde la formalización del contrato, y contempla la posibilidad de una prórroga adicional de un año. La actuación se alinea con la Política de Seguridad de la Información del departamento y con la Estrategia de Ciberseguridad Nacional.
Prevención y respuesta ante ciberataques
Según Defensa, el objetivo es consolidar las capacidades de prevención, detección y respuesta frente a incidentes en el ciberespacio, un ámbito cada vez más relevante para la seguridad nacional. Las redes críticas y los servicios digitales que dan soporte a las operaciones militares figuran entre los principales activos a proteger.
La inversión incluye herramientas de uso transversal que permitirán mejorar la resiliencia de los sistemas y reforzar la coordinación interna ante amenazas avanzadas.
Apoyo técnico a la Armada
Junto a las grandes partidas, el Ejecutivo ha autorizado un acuerdo marco de 28,48 millones de euros para servicios de asistencia técnica en actividades de apoyo logístico. El contrato dará cobertura a los arsenales de la Armada y a la Jefatura de Servicios Generales y Asistencia Técnica, con sede en Madrid.
La duración prevista es de dos años, con opción a dos años adicionales de prórroga. Defensa destaca que este apoyo externo especializado permitirá complementar las capacidades propias y asegurar la calidad de la información en los procesos de aprovisionamiento.
Con este conjunto de decisiones, el Gobierno refuerza áreas consideradas críticas para la operatividad presente y futura de las Fuerzas Armadas, en un contexto de creciente exigencia tecnológica y de seguridad en el ámbito internacional.