Miedo a la guerra . Ese es el ánimo dominante en la sociedad checa cuando arranca la segunda ronda de las elecciones presidenciales y el factor que ha moldeado la campaña. El general retirado Petr Pavel, favorito en las encuestas, llenó el miércoles la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga de entusiastas con pancartas en las que podía leerse «Pavel na Hrad» (Pavel al castillo), un eslogan que recuerda a los días de la Revolución de terciopelo, cuando en esa misma plaza se gritaba «Havel na Hrad», a favor del disidente Václav Havel. La asociación de las dos figuras políticas no soportaría un análisis exhaustivo, porque Pavel era entonces miembro del Partido Comunista y sirvió como paracaidista en el ejército de la URRS, pero sobre el escenario de sus mítines defiende la ayuda a Ucrania contra la invasión rusa y unas posiciones muy apegadas a las de la UE. «Nos jugamos mucho en esa guerra, porque si los rusos no son derrotados allí vendrán después a por el resto», declara a Radio Praga Karina, una estudiante de Medicina partidaria de Pavel, «aquí ya sabemos cómo se vive bajo la bota rusa». Así, una campaña que debería haber versado sobre la lucha contra la corrupción, se ha convertido en un debate sobre qué posición debe asumir la República Checa en relación a la guerra en Ucrania. Noticia Relacionada estandar No Leopard, M1 Abrams... las claves del envío de carros de combate a Ucrania y cómo va a cambiar la guerra David Sánchez de Castro El envío de armas con capacidad ofensiva supone un giro en el paso de la guerra cuando se va a cumplir un año del inicio del ataque ruso Pisando los talones a Pavel en las encuestas, el ex primer ministro Andrej Babiš defiende una posición de no intervención. El pasado domingo, en el debate televisado, Babiš afirmó que, en caso de que Polonia o los países bálticos fueran atacados por Rusia, como ya lo ha sido Ucrania, s e negaría a enviar soldados checos para defender su independencia territorial. «No, desde luego que no, porque yo no quiero que entremos en guerra, quiero la paz y de ninguna forma enviaría a nuestros hijos, a los hijos de nuestras mujeres, a la guerra», dijo, rechazando así el compromiso adquirido como país miembro de la OTAN. Un 'belicista' contra un 'no intervenionista' El revuelo internacional en la región fue de tal calibre que Babiš tuvo que reunirse con representantes del gobierno polaco para aplacar su inquietud. Babiš se desdijo y canceló varios actos electorales debido a varias amenazas recibidas, pero ha seguido presentando a Pavel como un belicista y prometiendo que no «arrastraré» a la República Checa a la guerra. El politólogo Jakub Horák acusa a Babiš de estar « parasitando » el medio a la guerra y advierte que «su única posibilidad de éxito radica en desalentar y dividir a muchos de los que rechazaron su candidatura en la primera ronda». Solo los separan, según las encuestas, unos pocos miles de votos. Pavel, un candidato independiente con apoyo gubernamental, ganó por estrecho margen la primera vuelta de las elecciones presidenciales, obteniendo el 35,4% de los votos. Babiš (ANO, Renew) ocupó la segunda posición con el 34,9%. La comisionada de Derechos Humanos del gobierno, Klára Šimáčková Laurenčíková, ha expresado su preocupación por los niveles «alarmantes» de desinformación en torno a la campaña en una entrevista publicada por iRozhlas.cz. MÁS INFORMACIÓN noticia No El Grupo de Visegrado se plantea incluir a Eslovenia «Lo que hemos visto en los últimos días es, desde mi punto de vista, impresentable. Si alguien está alarmando de manera absolutamente irresponsable sobre la movilización y la guerra, sin tener información basada en ninguna base racional y causando pánico, particularmente entre las partes más frágiles de la sociedad, entonces realmente creo que debemos tomar una posición clara en contra de este enfoque«, ha denunciado, tras informar que más del 90% de los usuarios de Internet en el país se encuentran con correos electrónicos en cadena en su buzón personal y uno de cada cinco incluso los difunde entre sus contactos. Son correos electrónico s con noticias falsas o desinformación que según sus expertos proceden de fuerzas extremistas y prorrusas que respaldan a Babiš, incluido uno que informaba sobre la supuesta muerte de Pavel desde una cuenta falsa que citaba al «portavoz» de Pavel.