La Virgen de la Esperanza Macarena ha sido repuesta al culto dos veces este sábado. La primera de ellas, a primera hora de la mañana, cuando la Hermandad abrió las puertas de la Basílica para que todos los hermanos y fieles se encontraran con la imagen después de cinco días de ausencia. Motivados por la restauración que estaba efectuando el profesor Arquillo y su equipo sobre la imagen, unas labores que en principio iban a ser solo de carácter conservativo, pero que han tenido ciertos cambios en la imagen, que ha generado un gran debate y revuelo entre toda la Sevilla cofrade. Esto ha motivado, de hecho, que la propia hermandad tuviera que cerrar las puertas de su templo una hora antes del horario previsto a eso de la 13:00 de la tarde, para efectuar con carácter de urgencia un retoque sobre la imagen, especialmente sobre las pestañas de la Virgen, que eran bastante más grandes de lo habitual. A eso de las 18:00 de la tarde, es decir, con apenas cinco horas de diferencia, ha vuelto a reabrir al culto la Basílica con la imagen ya con un nuevo aspecto y unas pestañas más pequeñas, más acordes a lo que estamos acostumbrados en Sevilla con esta imagen tan fundamental. Sin embargo, el debate permanece en torno a esta intervención que ha sufrido la imagen y a las garantías con las que se ha afrontado en un momento en el que la Junta de Gobierno pasa por un momento delicado, porque quedan apenas cinco meses para las elecciones de la Hermandad de la Macarena . ¿Cómo ha sido el resultado? ¿Ha sido bueno? ¿Ha sido malo? Juzguen ustedes mismos.
