Claveles empapados y cruces desoladas, las cosas del Mayo Festivo cuando arranca en abril. El viraje vaticinado del tiempo ha dejado este sábado las calles como recién fregadas, y ha dibujado, a primeras horas, un cuadro invernal de paraguas y abrigos en una Córdoba que despertaba borrascosa. La estampa de las 46 instalaciones , que el viernes por la noche bullían con la marabunta, ha sido de unas Cruces yermas en su arranque, pero que poco a poco, con los claros que se han ido abriendo paso en el cielo, han ido 'resucitando' a la fiesta . Читать дальше...