Es la eterna cuenta pendiente. El asunto del que se habla sin solución desde hace décadas en la cultura de la ciudad. Es la ampliación del Museo de Bellas Artes de Sevilla, al que los políticos se suelen referir como la «segunda pinacoteca de España», pero que ni de lejos cuenta con unas instalaciones acordes con ese rimbombante calificativo.
Porque la ampliación del Bellas Artes lleva enquistada desde los años 80 del siglo pasado, convertida durante todos estos años más en un arma arrojadiza en la confrontación entre Junta de Andalucía y Gobierno que en una cuestión esencial de la agenda política. Desde luego, durante años no lo fue para la Junta, que prefirió invertir sus fondos en instalaciones como el...
Ver Más