Cerro Castor: un paraíso con sabor a poco
El centro de esquí más popular de Ushuaia empezó la temporada de invierno con el pie izquierdo, envuelto de quejas y falta de organización.
Huír de la rutina... pero las largas filas de los trámites en la ciudad y el agobio parecen no quedar atrás si el lugar escogido para pasar unas vacaciones relajantes y lejos del estrés cotidiano es Cerro Castor.
Al rededor de un paisaje imponente y un lugar que promete todo para unas vacaciones perfectas, el centro de esquí más austral del país, ubicado a 26 kilómetros de Ushuaia, levantó una avalancha de quejas por la desorganización para subir a sus pistas y la disconformidad de quienes eligieron este destino como lugar para vacacionar este invierno.
"La atención del personal es pésima. En la boletería, en los medios y en los restaurantes", es uno de los muchos comentarios que dejaron los usuarios en un popular sitio de web de reseñas turísticas después de experimentar malos tratos y destiempos a la hora de interactuar con los encargados de las diferentes áreas de Cerro Castor.
No es la primera vez que el centro de esquí queda expuesto a este tipo de situaciones. En 2021, luego de una larga pandemia que golpeó fuertemente al sector turístico, hubo escenas similares a las de este año: turistas enfurecidos por la desorganización en las pistas, filas eternas para llegar a las aerosillas, el desgano de los empleados y la sensación de haber elegido el lugar incorrecto para desconectar de la cotidianidad, con el objetivo de pasar unas vacaciones alejados del estrés y el desorden.
Lo curioso es que hasta los comentarios que intentan ser positivos, dejan su huella amarga potenciando aún más la desilusión provocada: "Un lugar muy lindo. Los medios de elevación no se hallan abarrotados, salvo rara excepción (...). Lo malo, empleados del centro (boletería, base y rental), con muy mala predisposición, un trato al visitante que deja mucho que desear", dice Darío, usuario de una famosa plataforma de reseñas relacionadas a viajes.
Por si esto no parece suficientemente desmotivador, a la decepción se le suman los elevadísimos precios que no se condicen con la experiencia deseada. El día de alquiler por el equipo completo para esquiar o hacer snowboard alcanza los $ 7000 aproximadamente, y los pases a las pistas, unos $ 7500 más, cifras que pueden dar impotencia si el contexto no cumple las expectativas mínimas de cordialidad y calidad prometida.
Al final, ir a "vivir el invierno" en Cerro Castor, como proponen en su web, puede ser una experiencia que será mejor re chequear a la hora de elegirlo como destino de disfrute para las próximas vacaciones.