Aislante, fácil de limpiar y estético: cómo elegir el papel pintado adecuado
En los años 60 y 70 en España muchas casas se decoraban con papel pintado; solo hay que ver películas de la época. Sin embargo, en los 80 algo cambió, y el gotelé inundó los hogares. Esta pintura espesa, que se proyecta en las paredes con rodillos o pistolas, tiene muchas ventajas para los constructores, y casi ninguna para los habitantes del piso. El gotelé disimula las imperfecciones de las paredes y es más barato que dejar el yeso y la pintura totalmente lisa sobre la pared. También disimula los golpes y arañazos que se producen con el tiempo.
Sin embargo, el gotelé acumula polvo y es difícil de limpiar, multiplica el coste de pintar de nuevo (hace falta más cantidad de pintura), dificulta la decoración y, sobre todo, es notoriamente complejo quitarlo. Incluso cuando se retira de las paredes, los habitantes de la casa se encuentran con todo el horror que el gotelé estaba ocultando: paredes desiguales, humedades, yeso de pésima calidad. Aquí es donde el papel pintado puede ser una opción más interesante que igualar todas las paredes.
A los inconvenientes anteriores hay que añadir el que el gotelé no es un buen soporte para el papel pintado. Los bultos de pasta de gotelé hacen que la adherencia sea mucho menor que en una pared lisa. Ante esto, hay dos opciones: retirar el gotelé, lo cual puede requerir lijar, mojar las paredes con agua o disolvente para reblandecer la pintura y rascar con una paleta, o bien cubrir el gotelé con una masilla específica que permite tener un acabado liso. Esta última opción suele ser la preferida por la facilidad de aplicación.
Una vez la pared está lisa, es posible aplicar el papel pintado. Hay muchas opciones, tanto en tipos de materiales, aplicación y, por supuesto, diseño. Hay varias opciones que puedes considerar:
Los más ligeros pueden ser adecuados para paredes que no están sujetas a roce, la humedad o a luz solar intensa, donde pueden durar un poco más de tiempo. Los vinílicos y de fibra de vidrio son adecuados para zonas de humedad, como la cocina y el cuarto de baño.
La forma de colocación del papel también influye en la decisión. La mayoría de los papeles pintados, sean ligeros, vinílicos o de fibras, se colocan mediante una cola especial que se aplica sobre las paredes. Esta es una opción resistente y duradera una vez seca, pero es engorrosa de aplicar, y en los papeles no transpirables, como los de vinilo, se forman molestas burbujas de aire bajo el papel al colocarlo que hay que eliminar cepillando hacia los bordes.
Hay una alternativa disponible para todos los tipos de papel anteriores: el papel pintado autoadhesivo, que no necesita cola. Es la única opción disponible que puede colocarse con seguridad directamente sobre el gotelé, y que además permite su retirada sin dañar la pared. A cambio, el precio de los rollos de este tipo de papel es muy elevado y en general solo se justifica en áreas o paneles pequeños.
Hay una opción que ha ganado popularidad en los últimos años: el papel pintado de vinilo o de fibra con base de TNT, o "tejido no tejido". El término "tejido no tejido" puede resultar confuso al principio, pero básicamente se refiere a un tipo de papel pintado que combina una capa superficial de vinilo o fibras con una base de fibra no tejida. Esta combinación ofrece diversas ventajas tanto en términos de funcionalidad como de aplicabilidad.
En la fabricación del papel pintado de vinilo tejido no tejido, una capa de vinilo (PVC) o de fibra de vidrio o textil se aplica sobre una base de fibra no tejida compuesta por una mezcla de celulosa y fibras sintéticas, como el poliéster, que se unen mediante procesos químicos, térmicos o mecánicos, en lugar de ser tejidas como en un telar. La capa de vinilo, de fibra de vidrio o textil, es la que lleva el diseño y color y la que proporciona resistencia a la abrasión, las manchas y el sol, mientras que la base de fibra no tejida proporciona estructura y estabilidad al producto final. El tejido no tejido (TNT) se usa en otras muchas aplicaciones, como por ejemplo las famosas mascarillas FFP-2, ya que el entrelazado de las fibras al azar es más eficaz para filtrar el aire que un tejido ordenado normal.
El papel pintado con base TNT tiene muchas ventajas a la hora de cubrir las paredes:
El papel pintado con base de tejido no tejido es una opción cada vez más popular debido a sus propiedades de aislamiento, facilidad de limpieza y atractivo estético. Sin embargo, también es un material más caro que otras opciones de papel pintado. A cambio, es fácil de colocar y un proyecto de bricolaje en el que nos podemos ahorrar algo en la instalación.