Canelo abruma a Golovkin y se lleva una trilogía que ya es historia del boxeo
Termina una trilogía que será historia del boxeo del siglo XXI y lo hace del lado del favorito y gran superestrella del ring, Saúl 'Canelo' Álvarez. El tapatío se llevó no menos de nueve o diez asaltos en una pelea que dominó de principio a fin, en la que Gennady Golovkin apenas mostró una tímida reacción en la parte final del combate . Los dos precedentes se habían saldado con un nulo -muy discutido, 'Triple G' pareció mejor- y una victoria a los puntos para Canelo. Tras 24 asaltos no había quedado claro quién era el mejor, por lo que la última docena de golpes era imprescindible. Canelo, rey del pago por visión y por lo tanto el que marca las reglas, demoró cuatro años la contienda, a la que llegaron anoche en Las Vegas, madrugada en España, con grandes diferencias: el kazajo con 40 años de edad, demasiados para los fantásticos 32 del mexicano , quien también marcó que la lucha fuera en las 168 libras, donde no conoce rival, en vez de en el peso medio, el natural de Golovkin. Así, con todo en contra, el kazajo se vio superado desde el primer round ante un Canelo que lanzaba unos volados de izquierda con muy malas intenciones, terribles. «Cerradito», le decía Eddy Reynoso a su pupilo , que se hizo amo y señor del centro de un ring en el que Golovkin no encontraba su sitio. Pasaban los asaltos y todos eran 10-9 para el de Jalisco, con una estrategia que rozaba la perfección. Sus golpes, 'jabs' como centellas, silbaban; los de Golovkin, por contra, erráticos. Canelo subió la intensidad en el quinto asalto y demostró que quería el ko, algo que nunca nadie le ha provocado al kazajo. De hecho, en sus dilatadas carreras, ninguno de los dos sabe qué es besar la lona. Sólo han perdido por las matemáticas . Traspasado el ecuador del combate, 'Triple G' y su esquina sabían que si la contienda completaba los doce asaltos, ganar en las cartulinas era casi utópico. Golovkin estaba obligado a buscar el ko, posibilidad que no llegó ni a atisbarse. Reaccionó el kazajo, pero demasiado tarde y ante un Canelo que no mostró vulnerabilidad alguna. Venía el de Guadalajara de perder con Dimitri Bivol en mayo ante el mismo público, tras cometer el error de subir a los semicompletos (175 libras) para enfrentar al ruso. Volvió a su peso natural, las 168 libras, donde nadie parece que, de momento, pueda quitarle sus fajas del Consejo Mundial de Boxeo, la Asociación Mundial de Boxeo, la Organización Mundial de Boxeo y la Federación Internacional de Boxeo. Sus nuevos retos son, de momento, una incógnita. Por su parte, Gennady Guennadievich Golovkyn se queda con un récord de 42 victorias, dos derrotas y un nulo. Sólo tres máculas en su extraordinario historial , todas ellas culpa el pelirrojo. Ya amortizado como el gran campeón que es, es probable que dispute alguna buena pelea más. Muy deportivo, se abrazó al rival tras la duodécima campana y reconoció su superioridad. Qué gran deporte de valientes . Había comenzó la velada en el T-Mobile Arena de la ciudad del pecado con Alejandro Fernández y un coro de mariachis cantando 'Mexico lindo' y terminó con Saúl 'Canelo' Álvarez (ahora con 58-2-2) celebrando al grito de '¡viva México cabrones!'. El escenario fue suyo de principio a fin en una pelea que comenzó a ganar cuatro años atrás.