Los vecinos de Toro pueden volver a beber agua del grifo tras dos días sin ser potable
Los cerca de 8.500 vecinos de la localidad zamorana de Toro vuelven a poder beber agua del grifo tras dos jornadas en las que su consumo ha estado prohibido por el alto nivel de arsénico. El último análisis realizado este viernes restablece la vuelta a la normalidad tras dos analíticas seguidas en las que el nivel de arsénico en el agua de la red de abastecimiento no superaba los 10 microgramos por litro, el límite máximo establecido para que el agua se considere potable. Durante los días que el agua del grifo no ha sido apta para el consumo directo ni para cocinar, aunque sí para fregar los platos, ducharse o lavarse los dientes, los toresanos han tenido que recurrir a comprar agua embotellada, que se agotó en algunos supermercados el primer día, hacer cola para recibir las garrafas de 10 litros que se repartieron el jueves y el viernes a la población o utilizar la potabilizadora que, a modo de fuente, funcionó desde la mañana del viernes en el barrio toresano de Tagarabuena. La alarma saltó el pasado miércoles por un análisis que la Inspección de Sanidad de la Junta de Castilla y León realizó el pasado 23 de noviembre, aunque no conoció los resultados hasta el pasado 5 de diciembre y fue dos días después cuando comunicó al servicio municipal de aguas de Toro que el nivel de arsénico era de 11,7, por encima del límite. La tardanza en conocerse el resultado fue censurada por el alcalde de Toro, Tomás del Bien, que aseguró que en los controles periódicos realizados por el propio servicio municipal de aguas mensualmente, el último de ellos seis días antes de la muestra que declaró el agua no apta para el consumo, los parámetro siempre estuvieron en niveles correctos, por lo que mostró sus dudas sobre el resultado del análisis oficial de Sanidad. El alcalde tampoco se libró de las críticas de la oposición municipal, que acusó a Tomás del Bien de no haber hecho nada desde que el pasado mes de junio la Inspección de Sanidad le comunicó que los niveles de arsénico eran elevados, aunque entonces aún dentro de los límites máximos permitidos. Los concejales de la oposición, del PP, pidieron que no se cobren nuevos recibos de agua hasta solucionar el problema y criticaron que el alcalde haya gastado esta legislatura tres millones de euros en conciertos, exposiciones y actos culturales y haya descuidado servicios básicos como el del agua de la red de abastecimiento. Noticia Relacionada estandar No Toro reparte garrafas entre sus 8.500 vecinos tras declararse no apta para el consumo el agua del grifo Alberto Ferreras El plan de actuación de Ayuntamiento y Diputación de Zamora contempla también la instalación en los próximos días de potabilizadoras portátiles Como solución a medio y largo plazo, el Ayuntamiento de Toro y la Diputación de Zamora acordaron habilitar una tercera toma de agua del acuífero utilizado para la red de abastecimiento toresana. Por su parte, la delegada territorial de la Junta de Castilla y León, Leticia García, se comprometió a ayudar en la búsqueda de soluciones y anunció que los controles de la calidad del agua por parte de la Inspección de Sanidad se mantendrán. Igualmente, el servicio municipal de aguas tomará muestras periódicamente para garantizar la salubridad del agua del grifo en Toro.