Cuando en 2018 todos los partidos llegaron a un acuerdo histórico sobre las bases del Estatuto del Artista tuvimos que pellizcarnos para creer que era cierto. Y lo era. El pacto se hizo posible en medio de la moción de censura que acabó con el Gobierno de Rajoy. Por difícil que pudiera parecer, en esas condiciones Podemos, PSOE, Cs, PP, más los nacionalistas valencianos, vascos y catalanes, suscribieron el desarrollo de un gran avance en el marco que regula a los trabajadores del sector cultural . Por eso cabe lamentar que ahora, en el fragor de la campaña continua en la que vivimos, y bajo las trompetas propagandísticas de nuestro actual Gobierno defectivo , se tenga tan poco cuidado por algo tan positivo como útil. Resulta que Miquel Iceta y Yolanda Díaz anuncian la tramitación legislativa de nuevas medidas incluidas en aquellos acuerdos. Pero en lugar de hacer las cosas bien, con un proyecto de ley, debate, plazos para enmiendas y los informes preceptivos, han elegido un nuevo decretazo de urgencia, en el que meterán, de paso, otras medidas que nada tienen que ver con el Estatuto del Artista . Los ministros señalan al PP por abstenerse (también se abstienen diputados catalanes), pero es el Gobierno el que lo está haciendo mal. Un pacto se cuida. O se rompe, como ahora entre las manos de Iceta y Díaz.
