El
Barça femenino consiguió una valiosa victoria contra la
Roma (0-1) en el Stadio Olimpico en la ida de los cuartos de final de la
Champions League, un resultado que permite encarrilar la eliminatoria en su objetivo de pasar a semifinales de la máxima competición continental por quinta temporada consecutiva, pero pese al triunfo la sensación en el vestuario azulgrana fue que se desaprovechó una buena oportunidad para dar un paso de gigante en su objetivo de pasar a la siguiente ronda europea. El conjunto de
Jonatan Giráldez fue el dominador del partido, pero en el tramo final la
Roma tuvo varias ocasiones que pudieron significar el empate y el técnico no acabó del todo satisfecho pese a la exigencia y dificultad de jugar Champions.
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