El plan oficial para el dólar, el cepo y la inflación: señales de abril para una salida invernal
Camino a cumplir los primeros 100 días de gobierno y reanudada la pulseada política en el Congreso por la ley Ómnibus y el DNU de desregulación de la economía, el ministro Luis Caputo busca avanzar con la hoja de ruta que posee para su gestión, la cual prevé comenzar a ver luz en abril con dos hechos importantes, como preludio de la salida del túnel que se proyecta para el segundo semestre.
"Bajar la inflación para estabilizar, estabilizar para poder crecer, crecer para bajar impuestos", es la línea que explicitó el ministro de Economía a la hora de intentar eliminar ante el mundo empresario la incertidumbre sobre los próximos pasos. En particular, respecto del futuro de la política monetaria que, en su visión, provoca que haya hoy algunos precios más altos en la Argentina que en las góndolas de Estados Unidos o Europa.
Para el titular del Palacio de Hacienda no hay dudas: el ritmo de devaluación del peso se mantendrá en 2% mensual, aún pese a las alarmas sobre la pérdida de competitividad que encienden muchos economistas. Para ello, señala, se hizo un mayor salto devaluatorio al esperado el 13 de diciembre pasado, con la intención de generarse el colchón que hoy se va desgastando.
La prioridad es mostrar una inflación de un dígito mensual lo antes posible, aún con la corrección de precios relativos, como remarcan tanto Caputo como el presidente Javier Milei al hablar del aumento pendiente de tarifas. Allí se juega la base de la credibilidad de la gestión.
El objetivo inmediato es que la inflación de alimentos, el rubro de mayor incidencia en el IPC y uno de los que más subió en los últimos 12 meses (casi 304% contra 276% del índice general), ya muestre una variación mensual de un dígito cuando el mes próximo se conozcan los datos de marzo, luego de que en febrero alcanzara el 11,9%. En ese camino se inscribe la presión a productores, mediante la posibilidad de facilitar importaciones, para retrotraer precios de productos de la canasta básica que se dispararon en la previsión de una mayor devaluación que no se dio. Así, un aumento del ritmo del crawling peg atentaría contra esa estrategia por el potencial traslado a los precios.
Reservas netas positivas e inflación de alimentos en un dígito, para llegar a levantar el cepo cambiario y mostrar inflación general en un dígito al final del primer semestre
Para mayo o, a más tardar, cuando el invierno toque a la puerta a fines de junio, la intención del Gobierno es mostrar una inflación general de un dígito mensual. Por entonces, estiman, se habrá cumplido un semestre de disciplina fiscal y saneado gran parte del balance del Banco Central, luego que también el mes próximo las reservas netas vuelvan a terreno positivo. Con ello, será momento de levantar el cepo cambiario y esperar una reactivación de la actividad económica.