Prohibir el tabaco, otra ocurrencia de sumar
La ministra de Sanidad, Mónica García, se ha mostrado abierta a seguir los pasos de Reino Unido, cuyo Parlamento aprobó el pasado martes prohibir el tabaco a todos los nacidos a partir de 2009. La medida sólo puede interpretarse como una ocurrencia, pues una prohibición semejante, además de atentar previsiblemente contra derechos fundamentales, estaría discriminando la libertad de los ciudadanos en virtud de su año de nacimiento. De aprobarse una medida de este tipo, nos encontraríamos con el absurdo de que dos mayores de edad tendrían un catálogo de libertades diferentes, algo que jamás podría tener cabida en nuestro ordenamiento jurídico. La medida no sólo es un sinsentido sino que, además, colisiona con la posición que ha venido defendiendo Sumar, que hace poco más de un mes registró una iniciativa para legalizar la tenencia y consumo de cannabis. En Sumar están ayunos de agenda y foco, pero este tipo de extravagancias sólo sirven para dinamitar el escaso crédito que conservan.