Xavi Hernández protagonizó la rueda de prensa previa a un partido más corta de su carrera como entrenador del Barça. Diez minutos y doce preguntas, once de ellas con cuestiones sobre su futuro tras el desencuentro con
Joan Laporta provocado por su comparecencia del pasado miércoles antes de la visita al Almería, cuando, en resumen, vino a avisar que sería difícil volver a tener una plantilla de ensueño para intimidar en Europa por las dificultades económicas. Tras proclamar que el club, pese a las informaciones sobre su posible destitución en los próximos días, le transmite tranquilidad y confianza, también habló de cómo están los jugadores ante esta nueva incertidumbre sobre quién será su entrenador la próxima temporada.
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