La calle que lleva el nombre de Pérez Galdós en Madrid se llamaba del Colmillo hasta 1899. Dice la leyenda que se habían encontrado por la zona los restos de un mamut en unas excavaciones y que sus colmillos habían sido llevados al palacio del Alcázar en la época de Felipe III. Pero hay otra versión alternativa que apunta a que había un comercio en el lugar que exhibía en su escaparate los atributos del animal. Galdós tuvo un entierro multitudinario al morir en 1920. Pero la calle que le rememora es corta y estrecha, casi un callejón. El venerable fabulador merecía más, pero seguramente a él le complació la elección. Primero, porque era muy modesto. Y segundo, porque había...
Ver Más