De los etarras al voto útil: así ha sido San Isidro en clave electoral

José Luis Martínez-Almeida ha tardado media hora en entrar en la ermita del Santo. Y otro tanto en llegar a la caseta del PP, en la avenida principal de las fiestas de San Isidro . El alcalde se detenía una y otra vez para hacerse fotos con chulapos y chulapas, hasta con un oso polar de Greenpeace que le esperaba bajo el sol de mayo. En la puerta de la ermita, decenas de vecinos ondeaban pancartas: «¡No a la tala!» Le reprochaban el «arboricidio» que ha criticado la izquierda en la recta final del mandato, junto a padres y madres que reclamaban árboles en los colegios de sus hijos. Almeida ha llegado, al fin, a la carpa de su partido, donde corrían las cervezas y los bocatas de chorizo, en un ambiente festivo. «Prácticamente todas las encuestas dicen que estamos por encima del 40% del voto, en torno a los 26 concejales», ha celebrado. El PP necesita 29 ediles para alcanzar la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Madrid. Faltan 13 días para las elecciones . La última encuesta del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) dibuja un escenario abierto en la capital. El bloque de las derechas y el bloque progresista podrían empatar en número de votos. Y el día grande en Madrid, las fiestas de su patrón, se ha desarrollado en clave electoral. Cada candidato ha hecho sus visitas, sus paseíllos y sus declaraciones por separado en la pradera. Con un tema político por encima de todos: las listas de Bildu, que incluyen a 44 etarras, y sus pactos parlamentarios con Pedro Sánchez. «Cualquier partido que tenga pactos con Bildu, especialmente el Partido Socialista, lo que debería hacer es romperlos si tuviera un mínimo de decencia, dignidad y respeto por las víctimas del terrorismo», ha lanzado Almeida a primera hora de la mañana. Noticia Relacionada Elecciones 28M estandar No Ayuso pide plantear la ilegalización de Bildu Mariano Calleja La presidenta de la Comunidad de Madrid ha criticado tajantemente a la formación vasca a su llegada a la celebración de la fiesta de San Isidro La candidata socialista, la exministra Reyes Maroto , le ha afeado el comentario: «Es lamentable que Ayuso y Almeida hablen de ETA en la fiesta de las y los madrileños porque no tienen propuestas para Madrid. Les insto a que se vayan a la política nacional si es lo que les gusta». La batalla municipal también se libra en clave nacional. El candidato de Vox, Javier Ortega Smith , ha exigido la ilegalización de Bildu. «Los etarras nos parecen lo más repugnante que ha habido desde que se aprobó la Constitución, la ETA está en las instituciones y debe ilegalizarse. A Bildu hay que sacarla de las instituciones», ha zanjado. Hasta hace medio año, Ortega Smith era el socio preferente de Almeida. Vox entregó sus votos para que el PP formase una coalición con Ciudadanos, pero la negociación de los presupuestos solo fructificó en una ocasión y, en los últimos meses, el grupo municipal bloquea iniciativas del PP en Cibeles. La relación está rota. Almeida quiere gobernar en solitario. «Vox es fuerza de gobierno. Nosotros tampoco queremos pactar con ellos, a todos nos gustaría poder gobernar en solitario, pero eso lo deciden los madrileños», ha remarcado este lunes Ortega Smith. Almeida, que hace tiempo que critica la imposibilidad de sentarse a una mesa con el portavoz de Vox, ha ido más allá: «Si alguien tiene miedo a que se gobierne con Vox, lo que tiene que hacer es coger la papeleta del PP». A la fiesta ha asistido otro matrimonio tocado, el de Almeida con su vicealcaldesa, Begoña Villacís . El reto de Ciudadanos es rascar el 5% de los votos necesario (80.000 papeletas) para volver a entrar en el Ayuntamiento de Madrid, donde el grupo municipal se ha desmembrado tras una crisis interna. Alcalde y vicealcaldesa (vestida de chulapa) han llegado a la pradera por separado. «Quiero apelar a todos los madrileños orgullosos: que se movilicen, que sean valientes, que sean conscientes de lo importante que es su voto, el voto útil, que evita que Madrid sea ese Madrid radical, crispado, que no se sienten representados en los zascas», ha dicho Villacís, en referencia a Vox. La candidata insiste en que son la alternativa a Ortega Smith. «La mayor parte de los madrileños somos liberales, somos de centro», ha remarcado. Y también ha opinado sobre el asunto político de la jornada: «Tenemos asesinos en listas electorales que no se arrepienten de lo que han hecho». Algunos candidatos ante las elecciones del 28M han hecho sus peticiones al santo. Villacís: salud, felicidad y «seguir viviendo el Madrid de tolerancia y de crecimiento». Maroto: salud y lluvia. «Necesitamos que llueva, porque esta sequía, consecuencia de la emergencia climática, que estamos viviendo aquí en Madrid, si cabe, con mayor preocupación», ha dicho la alcaldable del PSOE, que concurre a las urnas con un enorme reto por delante, revertir el descalabro socialista en la ciudad con un programa que, según ella, puede votar cualquiera. Los partidos de izquierda pelean por el liderazgo del bloque progresista. La candidata de Más Madrid (el grupo mayoritario en la oposición), Rita Maestre , ha sido optimista: «Estamos a muy pocos días de que el cambio en Cibeles se materialice, el cambio es posible, estamos a unos pocos miles de votos».