Llull y Mateo amplían su leyenda en Múnich

PESTAÑA bayern-madrid-j20-euroliga-23/24 Crónica 4 Chus Mateo consiguió su triunfo número 100 en Múnich como técnico del Real Madrid, la estadística que le reconoce como el entrenador que merece el club blanco hoy en día. Un hombre paciente, sabio y que ha sabido llevar a un grupo magnífico hacia la victoria de forma más que regular. Un logro que, sin embargo, quedó empañado por el único e inigualable Sergio Llull . El escolta, ante el Bayern, se convirtió en el hombre con más partidos disputados de blanco, 1047, tras superar a un Felipe Reyes que estaba en las gradas del BMW Park. Dos hitos que estuvieron endulzados aún más con la victoria número 19 del Madrid en Euroliga. Un equipo que, en la actualidad, tiene un obvio acento balcánico. Hezonja y Musa, tras su gesta ante el Efes , volvieron a ser los más entonados del equipo en un partido sin sobresaltos. Vive tranquilo el Madrid mientras su destino dependa del liderazgo anotador del croata y del bosnio. De momento, las continuas victorias lo corroboran. Magnífico inicio de Hezonja , ocho puntos para el croata que, cada día que pasa, reclama con más virulencia ser la estrella de este Real Madrid. Tanto él como Musa han alcanzado un nivel impensable hace poco más de un año, cuando su prometedor desembarco en el equipo blanco fue nublado por la irregularidad. Pero ahora, con permiso de Campazzo, son los dueños del ataque orquestado por Chus Mateo, impregnado de su calidad y carácter balcánicos. Noticia Relacionada Baloncesto estandar No El Gobierno otorga a Ricky Rubio la Gran Cruz al Mérito Deportivo ABC La ministra de Educación y Deporte, Pilar Alegría, lo ha confirmado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes Los visitantes intentaban mandar en el marcador, pero el físico muniqués, personificado en Ibaka y Bonga , impedía que los blancos se distanciasen. No fue hasta que llegaron las rotaciones en ambos bandos cuando el Madrid se sintió superior. Yabusele, Poirier y Campazzo, que comenzó desde el banquillo por la titularidad de Alocén , amedrentaron a los alemanes con su físico e incisivo baloncesto. Pablo Laso negaba con la cabeza. El Bayern comenzaba a quedarse sin ideas. Y, por supuesto, Llull era un dolor de muelas para los bávaros. El balear entraba aún más en la historia del Real Madrid, jugador con más partidos disputados en su historia (1047), con una cascada de puntos desde todas las posiciones. Un bombardeo durísimo al que se sumó Poirier . Harto de que le flotase la defensa alemana, el francés no dudó en lanzar desde la línea de tres y el resultado fue de lo más exitoso. Tres puntos y nueve de ventaja para los visitantes al descanso. Musa seguía siendo letal desde la línea de tres, pero la mayoría de los aplausos tras la reanudación se los llevó Alocén . El maño dejó los primeros destellos de su conocida brillantez desde su vuelta a las canchas hace poco más de un mes, tras casi dos años de baja por una lesión de rodilla. Ni siquiera un taponador consagrado como Ibaka consiguió frenarle. Fantástica noticia para el Madrid y, sobre todo, para el propio base. El Madrid mantenía la ventaja sin desfondarse y, cuando el Bayern amenazaba con acercarse demasiado, los chicos de Chus Mate o sacaban a relucir su depurada mentalidad campeona. No había nada que hacer y los alemanes acabaron por entender que este Madrid, de momento, no se cansa de ganar.