Había 92 custodios en el Reclusorio Sur la noche de la fuga de operador del Chapo
Omar Tonatiuh Zamora Mendoza, subdirector, y Óscar Labastida Galván, jefe de seguridad, hoy destituidos, eran las máximas autoridades del Reclusorio Sur de dónde el miércoles se fugaron tres reos que estaban en proceso de extradición a Estados Unidos.
Se trata de Fernando Meza González, Yael Osuna Navarro y Víctor Manuel Félix Beltrán, integrantes del Cártel de Sinaloa y el último de ellos operador financiero del grupo y cuñado de uno de los hijos del Chapo Guzmán.
Pero detrás de ellos hay decenas de funcionarios que estuvieron en el penal la noche de la fuga y quienes hoy están bajo investigación. Ocho de ellos ya fueron detenidos.
De acuerdo con un documento obtenido por El Financiero, al momento de la fuga había en el penal 92 servidores públicos de la Subsecretaria del Sistema Penitenciario para la vigilancia interna y 15 elementos de la policía para la vigilancia exterior.
En el documento se advierte que en el último pase de lista del martes, el de las 21:00 horas, había en el penal 5 mil 315 internos; mientras que en el primer pase de lista del miércoles, el de las 7:45 horas, solo reportaron asistencia 5 mil 312.
El funcionario de guardia responsable del penal era Omar Tonatiuh Zamora Mendoza, quien tenía el cargo de subdirector, pero en realidad era la autoridad máxima de dicho centro ya que al momento no había un director nombrado.
También estaba de guardia el jefe de Grupo, Miguel Ángel Juárez Pérez, y el supervisor de aduanas, César Santana Marroquín, quienes tenían a su cargo a 90 custodios, entre ellos los ocho que actualmente están detenidos.
Entre los custodios de turno destacan los nombres de Roberto Barenque Medina, jefe de vigilancia y encargado de la célula de traslado y conductor de la camioneta que se utilizó para la fuga de los tres integrantes del Cártel de Sinaloa.
Barenque Medina utilizó la orden de salida que tenía para el traslado del interno Víctor Manuel Félix Beltrán al hospital Rubén Leñero, para una atención médica, para subir en la misma camioneta a los operadores de Chapo Guzmán y lograr su salida del penal. En la camioneta también iban los custodios Daniel Rivas y Antonio de Meza.
Este era la última parte del plan que se fraguó con semanas de anticipación y podría implicar no solo a los servidores públicos que están en turno sino a muchos más.
Según las investigaciones los tres custodios antes citados y cinco más trataron de sobornar a sus compañeros del turno entrante para que los dejaran ir sin ningún problema. De hecho, por ahora a estos ocho custodios solo se les acusa del delito de cohecho y está pendiente la imputación por la evasión de reo.
A la lista de funcionarios que custodiaban el interior del penal antes citada se suma también 15 elementos de la policía capitalina que estaban en el exterior para atender cualquier eventualidad.
Al frente del grupo denominado relámpago estaba Manuel Guzmán Alfaro quien tenía a cinco elementos más bajo su cargo. Y al frente del grupo denominado Medio Camino, estaba Jorge Sosa Alvarado quien tenía a su cargo a ocho elementos más.
Todos ya han declarado ante la Fiscalía capitalina que al momento tiene dos carpetas de investigación iniciadas, uno de ellas por el delito de cohecho y otro por el delito de evasión de preso, ésta última registrado en el expediente CI-FXH/XO-1S/D/137/01-2020.