Este es el protocolo funerario que la CDMX aplicará para los fallecidos por COVID-19
El Gobierno de la Ciudad de México dio a conocer este viernes el protocolo de manejo de personas fallecidas por sospecha o confirmadas por COVID-19.
El consejero jurídico capitalino, Néstor Vargas, detalló en videoconferencia de prensa los tres escenarios para tratar los cuerpos de las personas contagiadas con la nueva cepa de coronavirus. Son los siguientes:
1. Muerte en el domicilio
-Cualquier persona podrá avisar del deceso a la policía capitalina, a Locatel o al 911. Dichas instancias se encargarán de informar a un Centro de Mando (donde las alcaldías están incluidas), con el fin de que contacten a la Secretaría de Salud.
-La dependencia acudirá al sitio donde falleció la persona y un médico emitirá el certificado de defunción, esto después de determinar si la causa fue COVID-19. De ser así, la secretaría y la Agencia de Protección Sanitaria harán una sanitización (limpieza con químicos) de la casa.
-Se establecerá quiénes eran las personas que estaban presentes en el hogar, así como aquellos que hayan tenido contacto con la persona fallecida, con el fin de tomar medidas pertinentes para evitar que se propague el virus.
-Los familiares determinarán si contratan a una funeraria privada o si solicitan los servicios brindados por el Gobierno, los cuales se darán sin costo alguno para la población vulnerable. Ellos también decidirán si su ser querido será inhumado o cremado. En este último escenario, las cenizas serán entregadas a la familia.
2. Muerte en hospital
-Si el paciente sospechoso o enfermo de COVID-19 muere en un nosocomio público, la responsable de emitir el certificado de defunción será la Secretaría de Salud. En el documento, se establecerá la causa del deceso. En hospitales privados, el proceso recae en la administración del lugar.
-Sobre la sanitización, Vargas señaló que es responsabilidad de los sitios, sean públicos o privados.
-Si hay un familiar que responda por la persona que murió, este decidirá si se contrata una funeraria privada, si hace uso de los servicios brindados por el ISSSTE o IMSS, o si por falta de recursos económicos, solicita ayuda al Gobierno capitalino para hacer todo el trámite de forma gratuita. Cualquier opción se encargará de la inhumación o cremación del difunto; también las cenizas serán entregadas a sus familiares.
-Pero, ¿qué pasa si no hay alguien que responda por el cuerpo? En estos casos, interviene la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX), en conjunto con el Instituto de Ciencias Forenses (INCIFO), ya que desconocen la identidad o no hay familiar para entregar los restos.
"Se debe dar aviso a la Comisión de Búsqueda de la Ciudad de México para 'echar a andar' los protocolos y procedimientos para buscar a familiares o personas cercanas al fallecido", destacó el consejero jurídico capitalino.
-El Gobierno de la CDMX hará los trámites ante el Registro Civil y, conforme marca la Ley de Búsqueda de la capital, se debe inhumar a la persona.
3. Muerte en la vía pública
-Se da aviso del deceso a la policía capitalina, al 911 o el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C5) informa por medio de su red de cámaras. Esto llega al Ministerio Público, que llamará a los Servicios Periciales, quienes emitirán el certificado por sospecha o confirmación de COVID-19 como causa del la muerte.
-Las alcaldías serán notificadas para que saniticen el sitio donde fue hallada sin vida la persona.
-Se da un seguimiento epidemiológico, donde se buscará si hay un familiar que reclame el cuerpo. En caso de que sí, él decidirá si contrata un servicio funerario privado o si requiere apoyo gubernamental. Podrá ser inhumado o cremado; en el último caso, las cenizas serán devueltas a la familia.
-Si no hay alguien que reclame el cuerpo, intervendrán la Fiscalía General de Justicia capitalina y el INCIFO; se dará aviso a la Comisión de Búsqueda. Igualmente, se harán los trámites ante el Registro Civil y el individuo será inhumado.
Acerca de las firmas privadas y los crematorios del Gobierno capitalino, Vargas expuso que colaboran de manera estrecha con ambos "tanto en las seis alcaldías que tienen hornos (...) y con las empresas que se dedican a esta actividad. También hay coordinación con los alcaldes para la disponibilidad de fosas en caso de que se realicen inhumaciones".
En la videoconferencia, la secretaria de Gobierno de la CDMX, Rosa Icela Rodríguez, destacó que se recomienda no hacer velorios ni necropsias a las víctimas de COVID-19, ya que el nuevo coronavirus permanece en los cuerpos aún después del deceso.
"Los cuerpos serán entregados en bolsas especiales en los servicios funerarios, que deberán permanecer cerradas", indicó.
Sin embargo, precisó que si la familia desea hacer una ceremonia en honor a su ser querido, esta no deberá exceder de las 20 personas. Además, no se podrá trasladar el cuerpo fuera de la zona conurbada de la Ciudad de México ni al extranjero.