Con rebrotes en varios estados, Trump prepara su primer mitin en más de 3 meses en plena pandemia de COVID-19
El presidente Donald Trump busca revertir un descenso en su capital político este sábado con un masivo acto de campaña ante miles de partidarios en Tulsa, Oklahoma.
El acto pudiera ser uno de los mayores eventos bajo techo en el país desde que las congregaciones grandes fueron suspendidas en marzo debido a la pandemia del nuevo coronavirus.
El mitin fue programado a pesar de las protestas de las autoridades locales de salud y de que los casos de COVID-19 están aumentando en varios estados. Además, se espera que el evento atraiga muchedumbres de manifestantes al área.
A esto se suma que el equipo de campaña del presidente informó que seis personas que ayudaban a preparar el mitin dieron positivo a COVID-19.
El director de comunicaciones de la campaña, Tim Murtaugh, aclaró que se iniciaron inmediatamente “procedimientos de cuarentena” y que ningún miembro del personal que dio positivo asistirá al evento. Añadió que nadie que tuvo contacto inmediato con los infectados asistirá.
Funcionarios de la campaña subrayaron que a todos los asistentes al evento en Tulsa se les tomará la temperatura antes de pasar por el chequeo de seguridad. Se les darán cubrebocas, si los desean, y desinfectante de manos a la entrada del BOK-Center, que tiene 19 mil asientos.
Dos países distintos
Han pasado más de tres meses desde que Trump hizo un acto de campaña. En ese entonces, la tasa de desempleo era de 3.5 por ciento y el número de casos estimados del nuevo coronavirus era de 91.
“Nuestro país es más fuerte que nunca”, afirmó Trump el 2 de marzo.
Ahora, la tasa de desempleo en EU es de 13.3 por ciento; el número de casos confirmados de coronavirus llegó a 2.2 millones y van al menos 119 mil decesos confirmados por la enfermedad.
La indignación por el trato del sistema legal hacia los afroamericanso y otras minorías estalló en protestas en todo el país, desatadas por la muerte de George Floyd a manos de la policía en Minneapolis. Apenas una cuarta parte de los estadounidenses dice que el país va en buena dirección.
Trump entiende lo que está en juego y está determinado a regresar a sus eventos distintivos de campaña. El presidente desestimó quejas de que congregar a tantas personas bajo techo creará un riesgo de diseminación para el virus.
La visita de Trump a Tulsa ha causado además temores de choques entre manifestantes y los partidarios de Trump. Las autoridades esperan una muchedumbre de 100 mil o más personas en el centro de la ciudad. Trump hablará en el BOK Center y además en un escenario al aire libre. Pero su audiencia serán también votantes en estados clave como Pensilvania, Carolina del Norte y Florida.