Lecturas de la elección mexiquense desde San Lázaro
En este momento no hay nada para nadie y todavía hay que esperar una que otra bomba mediática inmersa en la guerra sucia en contra de Delfina y su equipo cercano.
Con la elección del Estado de México se inician las hostilidades rumbo a los comicios presidenciales del próximo año, y con ello entraría el país en una espiral de violencia política con resultados impredecibles.
En momentos en que se requiere cerrar filas contra los grandes desafíos que enfrenta el país, el presidente López Obrador ha preferido dedicar sus capacidades a consolidar el avance de Morena en el país, al tiempo de asegurar el triunfo de su corcholata el próximo año.
Es decir, las prioridades del presidente no son las mismas que tiene el pueblo pobre y enfermo, sino consolidar el Obradorato para los próximos años.
Esta visión presidencial del futuro no la comparten millones de mexicanos, que están decepcionados de su administración y que lo manifiestan de diversas maneras como el salir a protestar a las calles, o de expresar su apoyo en las urnas a los candidatos de oposición como es el caso de Alejandra del Moral en el Estado de México, en donde aún en el caso de que perdiera ya se estableció que hay millones de mexicanos en la capital del país y el Estado de México que no comulgan con el tabasqueño.
De hecho, las dos manifestaciones ocurridas el fin de semana, una en apoyo a la SCJN y otra a favor de Alejandra del Moral, a la que acudieron todos los principales colaboradores del gobernador Alfredo Del Mazo y su familia, son expresiones contundentes del rechazo al actual gobierno de AMLO.
Esta es una de las grandes lecturas de la jornada electoral en el Edomex, la otra es que cuando la oposición está unida con la sociedad civil puede acceder al poder, siempre y cuando se dejen atrás los intereses partidistas y personales de las cúpulas nacionales del PAN, PRI y PRD, tal como ocurrió en el Estado de México.
Independientemente del resultado del próximo domingo en tierras mexiquenses, los aliancistas ya ganaron porque pudieron convocar a la sociedad civil activa, a salir a las calles para expresar su rechazo a Delfina Gómez, candidata de AMLO.
El capricho de impulsar a la extitular de la SEP a la candidatura, tendrá consecuencias graves al proyecto político transexenal del tabasqueño.
Los manotazos que tira el totalitarismo desde el púlpito de la mañanera contra sus adversarios políticos, reafirman el liderazgo de AMLO sobre una masa cada vez más reducida de adeptos y consolida el crecimiento de sus opositores, quienes no se han dejado manipular por la mentira, la simulación y la demagogia.
Otra de las lecciones que dejarán los comicios en tierras de Isidro Favela, es el recrudecimiento de las hostilidades entre las corcholatas del presidente y la misma definición del candidato o candidata, ya que mientras más cerrada esté la elección, o incluso gane Alejandra del Moral, el presidente podrá ajustar su decisión en torno a desplazar a Claudia Sheinbaum para poner un candidato más competitivo.
Si gana Delfina Gómez por un porcentaje de dos dígitos, quiere decir que cualquier candidato que seleccione AMLO para la grande ganará; en cambio sí se aprieta la elección las fichas se moverán en favor de Marcelo Ebrard.
De ese tamaño es el impacto de lo que decidan los mexiquenses este próximo domingo 4 de junio de 2023.
No hay que perder de vista la participación del crimen organizado en los comicios, ya que, si pasa lo mismo que ocurrió en Sinaloa, Sonora, Michoacán, Tamaulipas, SLP y Guerrero por citar algunos estados, donde gracias al apoyo de los malosos, triunfaron los candidatos de Morena y sus compinches.
Mientras tanto, estamos a unos días de presenciar el derrumbe del PRI como partido hegemónico en el Estado de México, será histórico, porque jamás había gobernado otro partido político en esa entidad.
Alfredo Del Mazo entregará el poder a Delfina Gómez y con ello no solo pasará a la historia como miembro de una estirpe que gobernó el Estado de México por tres generaciones, sino por haber perdido la elección a manos de un partido, que lleva en la palestra nacional menos de 8 años.
Si en las elecciones estatales hay sorpresas y si hay alguna entidad federativa en donde puede darse, es precisamente el Estado de México con Alejandra del Moral, quien ante las ventajas que le dan a su adversaria en las encuestas, no se amilana, sino al contrario, valentonada advierte que la verdadera encuesta será en las urnas el día de la elección.
Como hemos dicho. En este momento no hay nada para nadie y todavía hay que esperar una que otra bomba mediática inmersa en la guerra sucia en contra de Delfina y su equipo cercano.