Los belarusos con 6 premios en el Campeonato Europeo Junior de Sambo en Serbia
Nuestro equipo junior estuvo representado en el foro continental por 11 luchadores de sambo, seis de los cuales consiguieron medallas.
Nuestro equipo junior estuvo representado en el foro continental por 11 luchadores de sambo, seis de los cuales consiguieron medallas.
Aleksandr Lukashenko deseó a Mijaíl Mishustin buena salud, prosperidad y notables logros en su responsable actividad estatal.
En la semifinal Veronika Ivanova cayó ante la rumana Kriszta Incze. En el torneo de consolación, en el combate decisivo por la licencia la representante de Belarús venció a la sueca Johanna Lindborg.
En la competición participaron 450 atletas de 85 países. En la final Egor Voropáyev (hasta 90 kg) venció al medallista de los Juegos Olímpicos de Tokio, el alemán Eduard Trippel.
La líder del equipo belaruso, Alina Gornoskó, obtuvo 128,750 puntos en cuatro ejercicios. Este resultado fue el segundo entre 43 participantes.
Hoy en 1/16 de final Sobolenko se impuso a la ucraniana Dayana Yastremska (33): 6-4, 6-2. El match duró 1 hora 27 de minutos. La representante de Belarús disputará la salida a los cuartos de final con la ganadora del match entre la ucraniana Elina Svitolina (19) y la rusa Anna Kalínskaya (26).
La bandera del Estado moderno, el escudo y el himno son también símbolos de victorias deportivas, creativas y laborales en la historia de la Belarús soberana.
Para mí, personalmente, este día tiene un simbolismo especial. Hace casi 30 años, el 14 de mayo de 1995, se celebró el primer referendo de la historia de la Belarús soberana. Entonces nuestro pueblo determinó su camino de desarrollo y sentó las bases de la política del Estado belaruso.
Marina Vasilévskaya, junto con representantes de la juventud, recitó el juramento de fidelidad a los símbolos estatales. A continuación, los militares de la Compañía de Guardia de Honor le entregaron la Bandera Nacional, y Marina Vasilévskaya se la entregó al Presidente. Este símbolo estatal ocupará su lugar de honor en el Palacio de la Independencia.
“En la fértil tierra del amor a la Patria, esta tradición brotó en nuestros corazones, convirtiéndose en algo verdaderamente nacional”, dijo el líder belaruso.
Esta fiesta fue establecida por el Decreto del Presidente de Belarús nº 157 del 26 de marzo de 1998 y se celebra cada segundo domingo de mayo.
“Cada palabra del himno, cada elemento de la bandera y del escudo revelan de forma invisible la retrospectiva de la vida de los belarusos desde sus orígenes hasta los brillantes logros de hoy”.