Espectacular carrera de MotoGP en Portimao: liderato de Martín, festival de Pedro Acosta y Marc Márquez, al suelo
Jorge Martín gana de principio a fin en Portimao, Pedro Acosta consigue su primer podio con un tercer puesto después de adelantar a Bagnaia y Marc Márquez, que acabaron en el suelo después de un toque bajo investigación
Han pasado tantas cosas en la carrera de MotoGP de Portugal que resulta complicado saber por dónde empezar. Jorge Martín ha despachado uno de esos monólogos que acostumbra a hacer en las Sprint y que le permite, por fin, ser líder del Mundial un domingo, ser el primer de verdad y lanzar el primer aviso después del subcampeonato del año pasado. Dos veces había sido líder en sábado, pero unas horas después perdía el primer puesto a manos de Bagnaia. Ahora no. El lunes va a estar en el liderato y se lo quieren quitar tendrá que ser dentro de tres semanas en Texas. Esta vez sí salió bien el madrileño de Pramac. Se puso en cabeza nada más apagarse el semáforo y nadie pudo volver a tomarle la matrícula. Victoria incontestable de esas de darle fuerte al martillo en todas las vueltas. El que más cerca estuvo fue Viñales, aunque al final cedió el segundo puesto ante el empuje de Bastianini y casi al final sufrió una caída un poco extraña que le dejó sin nada cuando merecía estar en el cajón.
Y en ese cajón se subió Pedro Acosta, que eclipsó todo lo demás con un carrerón en su segundo fin de semana en MotoGP. Está naciendo una estrella y no se puede decir que sea inesperado. Todo el mundo sabía que el murciano no es un rookie al uso, que se trata de un talento de esos que no saben esperar a que se cumplan los plazos. Que corren más que el tiempo, y por eso en Portimao se convirtió en el tercer piloto más joven de la historia en hacer un podio en MotoGP. Y ahora parece más factible que antes de Sachsenring consiga ganar una carrera larga y se convierte en el más precoz en ganar en la élite, por delante de Marc Márquez.
Y si ya Acosta dejó en Qatar un adelantamiento espectacular sobre Marc, en el Algarve dobló la apuesta y le pasó en el final de recta, en la curva uno, en una de las frenadas más críticas del todo el campeonato. Allí dejó una imagen para la historia, porque podría ser una de esas que marcan un cambio generacional entre campeones. Pero es que después de eso quiso más el "Tiburón", que se fue a por Pecco Bagnaia. No le bastaba con adelantar a un ocho veces campeón del mundo, quería hacer lo mismo con el vigente rey de MotoGP. Este duelo duró más, pero lo acabó ganando Acosta, que dejó atrás a los dos gigantes en busca de algo. más. Y ese más lo consiguió cuando se cayó Maverick, que significaba el primer cajón para este chico de Murcia que aprende rápido.
Y por si todo esto fuera poco, llegó el mano a mano entre Pecco y Marc. El de Cervera vio que el italiano no estaba cómodo y se fue a por él, olvidando esa versión actual de Márquez más conservadora. Se encendió como en sus buenos tiempos y llegó el toque entre ambos. Uno quería pasar por fuera, Bagnaia cerraba por dentro y se fue hacia el exterior para cerrar la puerta y llegó el toque que está bajo investigación y haciendo pensar a los jueces.