Utqiaġvik: La ciudad en Alaska que pasa dos meses al año sin ver el sol
En este pueblo el sol se pone el 18 de noviembre y no vuelve a salir hasta el 23 de enero, así sobreviven sus pobladores en la penumbra
En Utqiaġvik, un pequeño pueblo de Alaska, Estados Unidos, la única forma de saber si es de día o de noche es utilizando un reloj: el cielo permanece por más de dos meses en extrema oscuridad.
Sus habitantes, un pueblo indígena llamado Iñupiat, ocupan el territorio que antes se conocía como Barrow, uno de los lugares con las temperaturas más extremas en todo el planeta.
Es allí, donde la llegada del fuerte invierno se acompaña de “la noche polar”. Un fenómeno natural que trae consigo 67 días de penumbra total, en donde los más de 4.900 pobladores de Utqiaġvik deben resguardarse en sus viviendas para sobrevivir ante las fuertes temperaturas.
El pueblo se ubica en el noroeste del continente americano y es necesario hacer mucho zoom en la pantalla de un celular, si se quiere buscar en uno de los mapas interactivos. Está muy cerca al Ártico y, por lo tanto, su temperatura más caliente son los -4 grados centígrados.
Se dice que, en el invierno, el frío es tan intenso y penetrante que puede alcanzar los -22 grados, una de las temperaturas más bajas registradas en todo el planeta tierra.
Durante este tiempo, sus habitantes tendrán dos opciones: ver un escenario en donde los astros se estrellan en el cielo y las estrellas resaltan su brillo o un panorama de completa nubosidad y neblina.
Asimismo, se dice que el único rastro que deja el sol es lo que se conoce como el crepúsculo. Durante esos meses, el cielo solo se iluminará con la sombra del amanecer o la caída del sol al atardecer.
Sus habitantes ya conocen el plan perfecto para combatir el intenso frío que los obliga a estar encerrados durante varias semanas. Es entonces, cuando días antes a la llegada de “la noche polar”, los indígenas de esta región de Alaska llenan sus alacenas con comida no perecedera, agua y elementos primordiales para vivir en el asilo.
Sin embargo, hay quienes le hacen frente a la extrema temperatura y desafían el intenso clima para salir a hacer actividades que son recurrentes en el día a día.
La población ya está acostumbrada a los cambios extremos de este fenómeno natural. De hecho, se dice que en meses posteriores a “la noche polar” pasa un suceso completamente opuesto.
Durante el verano, la luz del día puede alumbrar al pueblo por más de 24 horas continuas. Esto se debe a la posición geográfica del territorio, con respecto a la inclinación del planeta tierra.
Científicos han estudiado por muchos años el fenómeno y se han dado cuenta de que el sol no se asoma durante algunos periodos del año, debido a que se esconde en el extremo opuesto del planeta.
El último registro de la “noche polar” se remonta al 23 de enero de 2023, luego de que el sol se escondiera el 18 de noviembre de 2022 y con él, todos los habitantes del pueblo más alejado de la civilización: Utqiaġvik.
El Grupo de Diarios América (GDA), al cual pertenece ‘La Nación’, es una red de medios líderes fundada en 1991, que promueve los valores democráticos, la prensa independiente y la libertad de expresión en América Latina a través del periodismo de calidad para nuestras audiencias.