Gobierno desconvoca ley contra el crimen organizado por jornadas laborales 4-3
Pilar Cisneros anunció a los demás jefes que, para destinar tiempo a mesas de diálogo sobre jornadas laborales 4-3, desconvocan tanto ese plan como el de delincuencia organizada.
El Gobierno anunció este martes la desconvocatoria del proyecto de ley contra el crimen organizado, así como el plan de jornadas laborales 4-3, con el argumento de que se requiere de tiempo para aclarar dudas sobre esta última iniciativa en mesas de trabajo.
La fracción legislativa del Frente Amplio (FA) denunció, poco antes de las 5 p. m., que el Gobierno estaba condicionando el avance del proyecto de seguridad.
Ambos expedientes se tramitan, desde el lunes, mediante procesos de vía rápida en el plenario legislativo. Aparte del Frente Amplio, ahora también Liberación Nacional (PLN) está en contra de la versión actual del texto sobre jornadas y busca devolverlo a una comisión para estudiarlo mejor.
A causa de esas dudas, la jefa de Progreso Social Democrático (PPSD), Pilar Cisneros, anunció que el Gobierno desconvocará el plan sobre jornadas de 12 horas de la agenda del Congreso, que actualmente controla el Poder Ejecutivo.
Pero Cisneros les dijo a los demás jefes políticos que también quitarían de la agenda el plan sobre crimen organizado, urgido por las autoridades del Poder Judicial para evitar la liberación, a principios de junio, de al menos 10 cabecillas de organizaciones criminales.
¿En qué consiste el plan sobre crimen organizado?
Esta iniciativa duplicaría los plazos de prisión preventiva para los sospechosos de narcotráfico, corrupción y otros delitos de crimen organizado. Además, duplicaría los plazos para las demás etapas de los procesos judiciales, por considerar que se trata de investigaciones complejas.
¿En qué consiste el plan de jornadas laborales?
El plan laboral legalizaría las jornadas en que los trabajadores laboran cuatro días por semana, con horarios de 12 horas diurnas, y descansan tres días. Si el turno es nocturno, trabajan tres días y descansan cuatro.
Reacción de los jefes de fracción
Sofía Guillén y Antonio Ortega, jefa y subjefe del FA, relataron que los cinco jefes de la oposición (Liberación, Unidad Social Cristiana, Nueva República, Liberal Progresista y ellos) rechazaron la desconvocatoria de los proyectos y le plantearon opciones a Cisneros.
Eliécer Feinzaig, del PLP, propuso sesionar de forma extraordinaria con el plan de crimen organizado, bien temprano el lunes, y luego hacer las mesas sobre jornadas 4-3.
Pilar Cisneros fue a consultar con la ministra de la Presidencia, Natalia Díaz, y le dijeron que no, que igualmente iban a sacar de la agenda legislativa el plan sobre crimen organizado el lunes.
“Le preguntamos por qué y nos dijo: ‘son los dos proyectos, o nada’. Que quede muy claro, en realidad el Gobierno sí condiciona el plan sobre crimen organizado al avance del proyecto sobre jornadas”, denunció Guillén.
La vocera frenteamplista añadió que, en su criterio, el Poder Ejecutivo no cree en el proyecto contra el crimen organizado.
Guillén dijo que la mayoría de los jefes pidió no desconvocar crimen organizado, pero el Ejecutivo mantuvo el retiro.
“Están en un punto de todo o nada, y lo triste es que lo que está en el centro es la seguridad de los costarricenses”, agregó el frenteamplista Antonio Ortega.
Cisneros confirma desconvocatoria
En declaraciones a los medios, Cisneros confirmó que se sacaría de la agenda legislativa los planes de jornadas y crimen organizado. El plan de jornadas será retirado de inmediato y el de seguridad el viernes, último día establecido para la presentación de mociones.
“Quedan los dos proyectos desconvocados, para hacer las mesas de trabajo sobre jornadas flexibles y, de acuerdo con el avance, decidiríamos cuándo volverlos a convocar”, confirmó.
Cisneros adujo que, si no se desconvoca el plan de seguridad, a qué hora se harían las mesas de trabajo sobre jornadas laborales 4-3, pues se tiene que desarrolar una sesión en la mañana y otra en la tarde para ver el plan de crimen organizado.
La oficialista arguyó que, si dejan el plan sobre seguridad en la agenda, tanto las sesiones de la mañana como las de las tardes se consumirían en la discusión de ese expediente.
Cuestionada por la prensa, respondió que sí da tiempo de aprobarlo antes de junio. “Podríamos trabajar viernes y sábado, en sesiones extraordinarias, y así recuperamos las sesiones que perderíamos”, alegó.