Crean un «chicle infinito» que nunca pierde su sabor
Todos conocemos la sensación de mascar un chicle durante mucho tiempo y que acabe convirténdose en algo más relacionado con una suela de zapato que con un artículo comestible. La idea de que el sabor intenso del principio de la goma de mascar dure para siempre es una cuestión de ficción: solo Willy Wonka, el solitario fabricante de dulces del libro «Charlie y la fábrica de chocolate», podía conseguir un chicle que cambiaba de sabor y que nunca se agotaba. Un invento hasta ahora limitado a la literatura (o el cine)... Читать дальше...