ERC pide a Sánchez que no renuncie: "Retroceder es una victoria para la extrema derecha"
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, acompañado de la cúpula de su partido, se ha desplazado a Ginebra para protagonizar un acto de campaña. La presencia de los nombres más destacados de ERC así como el formato que se ha querido dar al encuentro, con varias conversaciones y lecturas de textos, pretendían ser “una reivindicación del exilio”. Pero como en todos los mítines de este fin de semana, el protagonista ha sido de nuevo Pedro Sánchez.
A unas horas de que el presidente del Gobierno desvele su futuro, los republicanos le han reclamado que “no le tiemblen las piernas” y que no abandone el cargo. “Retroceder es dar la razón y la victoria a la extrema derecha”, ha señalado Aragonès.
Al igual que Junts, en ERC insisten en que, pese a “la represión”, ellos nunca se han rendido. “Cuando más represión ha habido, más victorias hemos asumido”, ha añadido el president.
La número dos de los republicanos, Marta Rovira, ha expresado su solidaridad con Sánchez pero a la vez le ha exigido resiliencia. De lo que se trata, ha subrayado, es de estar más que nunca al lado de la democracia.
Pese a empatizar con la situación del presidente del Gobierno, en ERC han expresado su malestar por lo que consideran una falta de sensibilidad de los socialistas y más concretamente del PSC por la situación que están pasando algunos de sus dirigentes.
El diputado Ruben Wagensberg, que se instaló en Ginebra a finales del año pasado después de que el juez García Castellón le incluyese en la causa de Tsunami Democràtic, ha lamentado que nadie del partido de Salvador Illa le haya enviado un mensaje.
Wagensberg, que ocupa el número 9 en la lista de ERC, ha tildado la actitud del PSC de “inhumana” y ha recordado que con diputados socialistas como Ferran Pedret han compartido muchas horas puesto que ambos formaban parte de la Mesa del Parlament.
“Fueron unos días durísimos, y la clave está en ponerlo dentro del hilo rojo de los exiliados, y no en clave personal”, ha subrayado el republicano al rememorar su traslado a Suiza y ha calificado su situación en esos días de “durísima”.